Cada pueblo posee una cultura propia que lo identifica plenamente e incrementa el valor de la misma cuando se tiene una genuina relación con el pasado. Esto constituye la tradición, que es un todo aprendizaje transmitido de generación en generación. La herencia más hermosa que reciben los pueblos y los hombres de sus antepasados lo constituye el Patrimonio histórico cultural que agrupa las obras creadas por sus sabios, arquitectos, músicos, artistas, escritores, artesanos, escultores, y todas aquellas manifestaciones que dan sentido a la vida y definen la identidad. Este patrimonio esta representado en los bienes materiales tangibles e intangibles de cada lugar sus monumentos históricos, obras de arte, literarias, cuentos, leyendas, danzas, costumbres, mitos, etc.

domingo, 23 de mayo de 2010

VII Festival de las Artes Escénicas y Musicales “Armando Urbina”

El objetivo principal de este festival que ya lleva 7 años realizandose en la ciudad de Guarenas- Guatire del Estado Miranda, a través del Nuevo Taller de Arte Escénico , es brindar un merecido homenaje al maestro "Armando Urbina"; el cual se llevara a cabo entre los meses de julio- agosto y septiembre del año en curso.

Implementar el Festival de Teatro “Armando Urbina” como medio para el rescate, organización y participación de las diferentes agrupaciones culturales y artistas de la región resaltando los valores y el patrimonio histórico cultural dela Republica Bolivariana, un evento Nacional e Internacional (América Latina y el Caribe), para el desarrollo decisivo de la identidad cultural, por la paz y la confraternidad.

1 comentario:

  1. Los sueños de Armando Urbina. Hoy son una realidad

    El Centro Venezolano de Dramaturgos “Armando Urbina”, la Villa del Cine y el Festival de teatro Armando Urbina en su VII edición fueron uno de los bellos sueños del dramaturgo y escritor guarenero Armando Urbina Ruiz.

    Estos sueños tomaron cuerpo por la década de 1950, cuando a su regreso triunfal del exterior tomó la feliz decisión de radicarse definitivamente en su pueblo natal y comenzó a sembrar en él la semilla de la dramaturgia teatral. Así, dio comienzo al grupo de teatro “El Corral”.

    Luego avanzó más allá, construyendo el más ambicioso proyecto cultural de ese tiempo: el Centro Experimental de Arte, y concluyendo con su obra póstuma conocida como El Teatro Negro de Barlovento, con el que se presentó en los carnavales de El Callao (Estado Bolívar), al lado de la Negra Isidora, el mismo año de su desaparición física, el 4 de mayo de 1983. Habían transcurrido sesenta años de su llegada al mundo.

    “Siendo notoriamente visibles las cualidades artísticas de Armando Urbina, gracias a la ayuda de su madre y al ingreso obtenido en su primera formación, cursó estudios de artes en las instituciones públicas Taller Libre de Arte y la Escuela de Arte “Cristóbal Rojas”, de donde egresó como escultor, específicamente en el arte de tanagra (esculturas en miniaturas, originarias de Tanagra, Grecia). Precisamente con este arte que destacó con grandiosidad, él se dio a conocer internacionalmente recibiendo en Argentina en el año 1950 el título de “Primer Tanagrista de América”, luego que unos expertos evaluaran su obra. El título lo conservó hasta su muerte.

    Pero su valiosa obra escultórica y tanagrista difícilmente puede apreciarse en nuestro país, puesto que según expertos del arte sus obras se encuentran distribuidas en distintos museos del mundo y algunas hasta adquiridas por coleccionistas privados. Entre sus obras escultóricas y dramaturgas destacan; “El más alto corazón”, “Yo soy quien es”, “Canto a la agricultura”, “La Ronda de los degenerados”, (su obra de mayor expresión psico-social la cual fue destruida por vándalos “hijos de papá” en los años 70). En el campo de la dramaturgia nos dejó “Sinfonía Mortal”, “Mirando el propio abismo”, “La voz de Prometeo”, “Experimento 5”, “Expediente 976”, “El pueblo pone los Muertos”, entre otras. (Claritza Guapuriche, Revista Génesis, año IV, Nº 36, 2003).

    La vida de Armando Urbina estuvo destinada a nuestro enriquecimiento cultural, fueron muchas las luchas y los obstáculos a los que se enfrentó para el desarrollo de su obra cultural. El Concejo Municipal de Guarenas lo eligió “Hijo Ilustre” el 21 de noviembre de 1952. Al sentirse hostigado por las autoridades municipales y la indiferencia de muchos guareneros optó por mudarse al hermano pueblo de Guatire, luego en busca de nuevos horizontes, logró abrigo en Araira, y finalmente el pueblo de Tapipas y su gente, le abrieron los brazos de par en par, quedando como fruto póstumo “El Teatro Negro de Barlovento”, grupo éste que ha sabido llevar por los confines del mundo la cultura afrocaribeña de nuestra Venezuela.

    ELIO RAFAEL BOLIVAR
    CRONISTA DE LA CIUDAD DE GUARENAS

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